La Comisión
Fiscalizadora de la Comisión Nacional del Medio Ambiente (Conama) propuso una nueva y
millonaria sanción a la Planta de Valdivia de Celulosa Arauco (Celco) por no presentar en
un informe trimestral todos los datos sobre las descargas de Residuos Líquidos
Industriales (Riles) que la empresa evacua al cauce del río Cruces, ubicado en la Décima
Región.
La omisión, según la
comisión, se registró en el documento que comprendía el monitoreo de mayo, junio y
julio. La información de ese último mes se entregó fuera de plazo y era referente a los
compuestos organoclorados utilizados por la compañía para blanquear la celulosa.
Atraso de datos
Según el director de la
Comisión Regional del Medio Ambiente (Corema) de Los Lagos, José Luis García Huidobro,
la empresa entregó los datos faltantes el 17 de noviembre, es decir con un atraso de más
de tres meses. Ante esa situación, la Comisión Fiscalizadora de la Conama se reunió el
jueves 18 de noviembre en Valdivia y dispuso la sanción que bordea las 200 Unidades
Tributarias Mensuales (UTM), es decir $ 6 millones. La multa debe ser aprobada por la
Comisión Regional del Medio Ambiente en los próximos días.
No obstante, García
indicó que en los datos que faltaban, incluidos los de julio, se verifica que las
descargas de Riles con los compuestos organoclorados se encuentran dentro de los rangos
permitidos por normas ambientales.
Nuevo traspié
Esta medida se suma a la
notificación que hizo la Corema el 28 de octubre, donde se solicitó que la industria
explique el hallazgo de 19 irregularidades o diferencias entre lo que establece la
Resolución de Calificación Ambiental (RCA) y el Sistema de Estudio de Impacto Ambiental
(Seia) y lo que finalmente la entidad puso en práctica desde su puesta en marcha, en
febrero pasado.
El plazo para la
propuesta de soluciones y potenciales explicaciones de parte de la Celulosa vence el
próximo miércoles.
Las conclusiones finales
de dicho estudio, ejecutado durante cuatro meses por la empresa consultora MA&C,
determinaron que dos de esas faltas son "mayores", o sea, que podrían causar
importantes daños al ecosistema si no se ejecutan acciones correctivas.
Los cuestionamientos
tienen relación con las descargas de residuos líquidos industriales (Riles) que la
planta evacua en las aguas del río Cruces.
Se trata de una descarga
de emergencia que no fue incorporada en el Seia y que hizo aumentar en 60% la producción
estipulada por la empresa.
Debido a la gravedad de
las recomendaciones del estudio, su difusión por parte del abogado Wladimir Riesco, uno
de los voceros del movimiento ciudadano que se ha organizado en Valdivia para exigir el
cierre de la planta ubicada en San José de la Mariquina, causó molestia en las
organizaciones sociales y ambientalistas de la zona que exigen mayor celeridad y
transparencia de parte de los organismos públicos encargados de fiscalizar a la
compañía de celulosa (ver nota secundaria).
Celco no se ha referido
al tema, pero publicó inserciones en la prensa sobre medidas de control de olores.