Un total de 30 familias que
habitan en sectores rurales de San José de la Mariquina, en Valdivia, han llegado hasta
las consultas veterinarias de esa comuna para denunciar la extraña muerte de animales
domésticos y otras especies, como aves y peces. Los hallazgos surgen tras la muerte de
más de 80 cisnes de cuello negro en el Santuario de la Naturaleza del río Cruces,
ubicado en la zona.
La médico veterinario Angela
Montecinos señaló a La Tercera que se trata de aves, corderos y vacas de
agricultores de la zona, además de gaviotas y salmones encontrados en ríos y humedales.
Según Montecinos, pese a que
no se han realizado estudios profundos a los animales, los primeros muestreos indicarían
que la mayoría de los casos se deben al consumo de agua contaminada. De acuerdo con la
profesional, las sospechas recaen en los residuos industriales que la planta de celulosa
Celco descarga al río Cruces. La empresa tiene un proceso de sanción pendiente por la
Comisión Regional del Medio Ambiente (Corema) de la X Región, por no detallar el
contenido de sus residuos y presentar 19 irregularidades en sus descargas.
Según Montecinos, las especies
habrían ingerido agua de esteros y pozos, tras lo cual han comenzado a presentar
problemas neurológicos. En el caso de las aves, las más afectadas son las gallinas. La
situación, a su juicio, es muy similar a la observada en el caso de los cisnes de cuello
negro.
Cerca de 20 gallinas han muerto
por cada familia afectada. "Trabajo en la zona desde hace cuatro años y nunca antes
me habían llegado casos de muerte de animales sin causa aparente. La gente llega
preocupada, casi con lágrimas", señaló Montecinos.
Catastro necrológico
Las numerosas denuncias
motivaron a Montecinos a llevar un catastro de los animales que han muerto, en el que ha
colaborado el veterinario de Valdivia Daniel Boroscheck, el mismo que encontró dos coipos
muertos en el río Cruces por presunta hemorragia intestinal, infarto hepático y
miocarditis.
Según el informe, los
registros de decesos son los siguientes: gallinas, gansos y ovejas desde hace cinco meses
en Pureo (río Lingue) y Puringue (estero Quechuco); salmones en Los Venados (estero que
desemboca en el río Cruces); gaviotas en la playa de Mehuín; dos vacas muertas y
corderos que pierden el pelo y se caen en Puile, y muerte de cisnes en el sector de
Tralcao (Pichoy). Al este de San José de la Mariquina llegaron cisnes en mal estado a una
laguna.
Montecinos asegura que debió
sacrificar un perro que frecuentaba la planta de celulosa. "Un trabajador de la
planta me lo llevó. Presentaba problemas nerviosos y convulsiones", afirma.
El alcalde de San José,
Rolando Mitre, señaló que desconoce las denuncias y descartó que la planta esté
contaminando el agua de la comuna. No obstante, Montecinos afirma que "en mayo hice
ver a la municipalidad y a personal de la Conama que varias familias denunciaron que el
agua tenía un color y hedor extraños".
El jefe del Servicio Agrícola
y Ganadero (SAG) de Valdivia, Marcelo Hurtado, indicó que no han tenido antecedentes ni
denuncias por la muerte de otros animales. "Estamos a entera disposición de la
comunidad con nuestros recursos humanos y técnicos", dijo.
Consultados por las denuncias,
en Celco declinaron emitir algún comentario al respecto.